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7 CLAVES PARA COMBATIR LA REBELDÍA ADOLESCENTE

La llegada de la adolescencia en la vida de nuestros hijos nos plantean varias interrogantes: ¿la adolescencia es sinónimo de rebeldía?, ¿toda rebeldía es definitivamente mala?, ¿debo sentirme orgulloso si mi hijo(a) adolescente es muy obediente?, ¿cómo lidiar con un adolescente muy rebelde?, ¿debemos, por todos los medios, liquidar el más mínimo asomo de rebeldía?, ¿puede haber una rebeldía sana necesaria?, ¿hay métodos eficaces para saber controlar la rebeldía adolescente?, ¿qué habilidades sociales deben desplegar los padres cuando tienen hijos rebeldes?, ¿cómo debemos reaccionar, mental y emocionalmente, frente a la desobediencia de nuestros hijos?, ¿es bueno ser condescendientes con ellos o, por el contrario, tenemos que ser más estrictos?, ¿sólo ellos tienen que mejorar su obediencia o también nosotros nuestra autoridad?, ¿cuál es la mejor forma de combatir la rebeldía adolescente?

Estas y otras preguntas más pretenden ser contestadas en el presente libro, que es un manual de ayuda para todo padre que quiera aprender a cómo lidiar eficazmente con la rebeldía de su hijo(a) adolescente. producto de la experiencia clínica y la literatura científica al respecto nace este libro titulado Las Siete Claves para Combatir la Rebeldía Adolescente, en sus páginas usted podrá aprender lo siguiente:

• El concepto de rebeldía y sus implicancias
• Tres manifestaciones típicas de la rebeldía
• El papel que juega la rebeldía en el proceso de maduración
• Rasgos de Madurez vs Rasgos de Inmadurez
• Habilidades sociales para bregar con la rebeldía adolescente
• ¿Cómo funciona el cerebro de un adolescente?
• Los tres grandes enemigos que destruyen la relación padre-hijo, como también sus tres grandes aliados... Y otros tópicos más.

FORMANDO UNA IDENTIDAD, CONSTRUYENDO UN DESTINO

Hay una íntima relación entre identidad y destino. El primero determina gran parte de lo que sucederá con el segundo. No se nace con un destino escrito, éste se construye sobre la base de una identidad que se desarrolla.

Nuestros hijos no llegarán más lejos en la vida, de lo que su personalidad se los permita. La grandeza de un destino está inexorablemente hipotecada a la salud de una identidad personal. Definitivamente les irá mal en la vida, si poseen una identidad lisiada, pero probablemente les vaya bien si pudieron desarrollar una identidad sana y positiva.

La familia es el gran taller donde se va tallando la identidad personal de los hijos. La arquitectura de una identidad sana es una hermosa escultura que como padres hay que ir esculpiendo con paciencia y dedicación. no hay nada en la vida que pueda darnos mayor satisfacción o mayor frustración, que ver el resultado de nuestra obra en la vida de nuestros hijos. Ellos pueden darnos las más grandes alegrías o las más inmensas tristezas, según el camino que escojan en la vida... ese camino está hipotecado a aun tipo de identidad que nosotros hemos contribuido en su formación. No avanzarán más en la vida, de lo que su identidad se los permita. Lo que ellos son, es lo que determinará lo que puedan hacer con su existencia... 

La identidad básica de los hijos se formará en esa gran incubadora que es la familia... El destino de ellos será quizá el gran examen que la vida nos tome, en cuanto a nuestra efectividad como padres... Nuestros hijos se enfrentarán al mundo con lo que nosotros hemos formado en ellos. Los recursos que afrontarán a las altas demandas de la vida, serán principalmente aquellos que nosotros hayamos sembrado en su ser interior.

LOS NIÑOS EN LA AGENDA DE DIOS

Existen 600 millones de niños en el mundo que viven en extrema pobreza y que por lo tanto son vulnerables y necesitan de nuestra ayuda. Sabe usted ¿cuántos millones de dólares invierte el mundo en armas y cuánto en los niños pobres?.

¿Qué sabe del movimiento homosexual que ha puesto su mira en la niñez como un objetivo a alcanzar? y ¿qué de la explotación sexual de millones de niños?. ¿Conoce usted a los Herodes de nuestro tiempo?, ¿La estructura de nuestros sistemas políticos, sociales y económicos de Latinoamérica están acabando o promoviendo la vida de nuestros niños?, ¿Cuál es la realidad de la niñez en el Perú?, ¿Qué lugar ocupa la niñez peruana en la agenda del Perú?, ¿Somos conscientes de cuántos niños mueren en el Perú cada año?, ¿Qué está haciendo el Estado, la sociedad, pero sobretodo, la iglesia de Cristo por esos pequeños?. ¿Cómo estamos tratando a la niñez que albergamos?, ¿Qué les espera, de aquí a 10 o 15 años, a esos millones de niños peruanos?, ¿Son nuestra esperanza o nuestra amenaza para el futuro?, ¿Qué papel juegan los niños en la restauración de una nación?, ¿Cómo va evolucionando la mentalidad de nuestros niños y jóvenes?, ¿Cuál debe ser la visión con la cual debemos trabajar con los niños? y ¿Cuál es nuestra responsabilidad frente a su futuro?. Esta y muchas otras preguntas más es lo que intenta resolver el presente libro. y de esta manera busca que los niños de hoy lleguen a un lugar importante en la agenda de nuestras iglesias, como lo está en la agenda de Dios.

"Es más fácil y mejor, construir la vida de un niño, que reparar la vida de un adulto".

CULTURA DE VALORES

Personas, instituciones, empresas y naciones están siempre buscando la clave para alcanzar el desarrollo; ¿Cómo podemos alcanzarla?, ¿Sólo depende de nuestra inteligencia, conocimiento o buena suerte?, ¿Qué es lo que hace grandes y fuertes a una persona, a una empresa o una sociedad?, ¿el dinero o la tecnología que poseen?, ¿sobre qué cimientos valederos debemos identificar nuestras vidas y nuestra nación?, ¿Por qué hay países ricos y países pobres?, ¿Por qué hay personas que fracasan y personas que triunfan?, ¿Dónde se encuentra la diferencia de ello?, ¿Qué papel juegan la ética y la moral en todo ésto?´En el presente libro buscamos resaltar el papel que juegan los principios y valores absolutos en el desarrollo de las sociedades. Nuestros argumentos no sólo se basan en un conocimiento bíblico, sino también en argumentos sociológicos e históricos. Resaltamos que el tema de la ética no es un asunto de moralismo y religiosidad, sino que es un factor importante y de conveniencia para prosperar como personas, como empresas y como nación.

"La ética y los valores con los que crece un país, son el sistema inmunológico de su sociedad; cuando ellos se pierden, inevitablemente la sociedad se enferma, degenera en un sida moral que lo llevará a la anarquía y a su posterior desintegración social..."

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